Por Washington Cabello
(SANTA CLARA, California, Estados Unidos).- El luchador profesional y expeleador de artes marciales mixtas estadounidense de la Ultimate Fighting Championship (UFC) actualmente firmado con Lucha Libre AAA Worldwide, Caín Ramírez Velásquez, conocido como «Caín Velásquez», le fue concedida la libertad bajo fianza que le había sido negada en cuatro ocaciones, por un millón de dólares.
El excampeón de peso pesado de la UFC, estuvo preso ocho meses, desde el 28 de febrero del corriente y se declaró inocente en agosto, acusado de intento de asesinato y otros 10 cargos relacionados con armas de fuego.
Los cargos contra Ramírez Velásquez, entre otros son: Perseguir en su vehículo y dispararle a Harry Goularte, quien por su parte está acusado de agredir sexualmente al hijo de 4 años de Ramírez Velásquez.
El juez Arthur Bocanegra, dispuso que el excampeón, de 40 años de edad, estadounidense de origen mexicano, tendrá que usar un rastreador GPS y no acercarse a 300 yardas de las presuntas víctimas, dijo Mark Geragos, su abogado.
«Ha sido un trabajo largo y estoy muy agradecido», dijo Geragos a ESPN. «Nada es tan conmovedor como verlo reecontrarse allí con su esposa Michelle», agregó.
«En lugar de escuchar todas estas hipérboles y tonterías, tuvimos una audiencia con interrogatorios y testigos bajo juramento», apuntó Geragos.
El juez Arthur Bocanegra le concedió la libertad bajo fianza el martes. Previamente le negaron la libertad bajo fianza cuatro veces.
En el expediente consta que este supuestamente le disparó al padrastro de Goularte, Paul Bender, cuando iba en su vehículo. «Siguió la camioneta en una persecución a alta velocidad de 11 millas a través de la ciudad de San José, embistió el auto y le disparó varias veces.
Relata el documento judicial que el hijo de Ramírez Velásquez, le dijo a la policía el 24 de febrero que Goularte, lo llevó al baño de una guardería y le tocó los genitales y que le dijo que no le dijera a nadie lo que pasó, y que esta situación pudo haber ocurrido «100 veces».
También el niño le dijo a la policía que vieron a Goularte, entrar al baño con otros niños.
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